Has reflexionado los últimos días sobre la vida
que estas viviendo, sobre cómo sin darte cuenta has perdido aquella sensibilidad
espiritual que te caracterizaba, ahora orar, leer la Biblia, congregarte o servir ya no es tan “emocionante”
como al principio.
Algo paso, tuvo que haber un momento en donde
seguramente descuidaste tu relación personal con Dios, en donde quizá comenzaste
a acomodarte a vivir una vida que va caminando un poco alejado de Dios sin
necesidad de llegar a la perdición total.
Y es que debemos ser consientes que alejarse de
Dios no solamente es ir y pecar deliberadamente, a veces a pesar que hacemos lo
mismo que hemos hecho los últimos años en la Iglesia, podemos vivir lejos de
Dios.
A veces estamos tan lejos de Dios que apenas y
escuchamos su voz, estamos tan lejos que apenas y lo sentimos, estamos tan lejos
que ya ni obedecemos al Espíritu Santo cuando nos redarguye.
Quizá tu seas un buen servidor o una buena
servidora de Dios, sin embargo las últimas semanas o meses has vivido lejos de
Dios. Quisieras sentir aquel deseo de buscar de Dios, aquella hambre que un día
tuviste, aquel anhelo de no dejar la presencia de Dios.
Quisieras llorar mientras lo adoras, llorar
mientras lo buscas, quisieras derramar tu alma en su presencia, pero tu mismo
distanciamiento con Dios no te permite ser sensible a su presencia ni audible a
su voz.
Hoy es un día para no solo reflexionar sobre que
tan lejos estas de Dios, sino para acercarte a Él. Hoy tienes que ser sincero
contigo mismo y reconocer que poco a poco te has alejado de Dios, quizá realizas
las mismas actividades de siempre: vas a la Iglesia, sirves, invitas, predicas,
cantas, enseñas a los niños, cualquier cosa que puedas hacer para Dios, pero a
pesar de ello pueda que te encuentres lejos de Él.
Estas palabras no son para todos, son nada más
para las personas cuyas vidas
redarguya Dios en este momento, para aquellos que se identifican con el hecho de
servir a Dios pero estar lejos de Él, para ellos en especial estas humildes
palabras:
“Cuando Dios te llamo vio en ti lo que nadie mas había
visto, Él te rescato, te perdono, te restauro y te hizo la persona que ahora
eres, por Él y para Él has alcanzado mucho más de lo que un día imaginaste poder
alcanzar, por esa razón hoy quiero motivarte directamente para que te acerques
nuevamente a Dios, no digas que no puedes, no digas que jamás será lo mismo, no
digas que ya no será igual, porque Dios siempre ha estado allí, nunca ha
cambiado, siempre te ha amado igual al primer día que te vio, sus planes nunca han cambiado, su propósito
para tu vida es el mismo que siempre ha tenido, por lo tanto deja aun lado aquel
acomodo y esa insensibilidad espiritual que te esta matando poco a poco y
comienza a accionar, comienza a buscarlo a Dios, comienza por disponer tu
corazón totalmente y tu mente solo para Él, Dios quiere encontrarse contigo, Él
quiere que le hables con sinceridad, Él quiere usarte grandemente, Él quiere
cumplir el propósito para el cual te llamo, por lo tanto deja de estar alejado
de Él, vuelve al sendero de Dios, doblega tu voluntad, has aun lado el cansancio
e intenta y no te canses de intentar mantenerte cerca de Él, porque cuando estas
cerca de Él, entonces eres FUERTE, ¡Adelante! ¡Que no se te olvide que tu eres
un guerrero de Dios o una guerrera de Dios! ¡Que no se te olvide que has sido
llamado para grandes cosas! ¡Tienes que ponerte de pie y comenzar a hacer lo que
mejor sabes, esto es BUSCAR A DIOS muy de cerca!”
Hoy Dios va a poner en tu corazón la disposición
total de acercarte a Él, hoy Dios pondrá en ti tanto el querer como el hacer
como lo dice su Palabra: “porque Dios es el que en vosotros produce así
el querer como el hacer, por su buena voluntad.” Filipenses 2:13 (Reina-Valera
1960).
¡Levántate y no te des por vencido!, ¡Tú naciste
para que Dios cumpliera un propósito perfecto en tu vida! ¡Jamás pienses que no
se cumplirá!
¡Acércate hoy a Él!
“Pero ahora ustedes, que estaban lejos de Dios, ya han sido acercados a él, pues están unidos a Jesucristo por medio de su muerte en la cruz.”
Efesios 2:13 (Traducción en lenguaje
actual)
Escrito originalmente para www.destellodesugloria.org